Una carta quemada es un gráfico dibujado para trabajar el trabajo restante contra el tiempo. La psicología simple de la carta es que ella enfoca la mente en lo que falta por hacer en vez de fijarse en lo que se ha logrado. Mientras que una apreciación de lo que se ha hecho crea el sentimiento de satisfacción, un sentimiento de lo que falta por hacer crea un sentido de urgencia.
La escala vertical puede ser medida en varias unidades. Puede ser esfuerzo (hora, días) o productos entregados. Algunos enfoque agile usan ‘puntos históricos’ en esta escala.
Cartas quemadas son comúnmente utilizada en enfoques agile que cubren un sola caja de tiempo (o sprint). En este caso la escala de tiempo será corta (típicamente 2 a 4 semanas) y allí la carta crea un sentido real de que se necesita hacer ante de que el sprint termine.
El principio de cartas quemadas podría ser utilizado en conjunción con otras técnicas tales como la consumición de tiempo colchón en los programas de la cadena crítica.
Gracias a Ignacio Manzanera por la traducción
